¿Qué debo hacer para vencer el pecado en mi vida?
¿Estás luchando con un pecado o un mal hábito?
Sé que en tu corazón quieres agradarle a Dios. Pero aveces sientes que no puedes más porque caes una y otra ves en el mismo pecado. Sabes que está mal, pero aún así lo vuelves a hacer. 
Y te preguntas y dudas. ¿Será que Dios me hizo así? ¿Será que simplemente no lo puedo evitar? ¿Qué puedo hacer para no volver a caer?
Es necesario que entiendas que cuando el pecado te somete, cuando  va en contra de tu voluntad, es porque hay algo más detrás, es porque existe una influencia espiritual detrás ese pecado que te esclaviza. 
Y esto no lo vas a poder vencer con tus propias fuerzas, sino cuando el Espíritu de Dios te liberte.
Y te tengo una gran noticia, el Espíritu de Dios quiere liberarte, el está ahí dispuesto a ayudarte. Sin embargo eres tú quien tiene que dar ese primer paso. 
Es tiempo  de confrontar ese pecado y llevarlo a la cruz. 
								Es necesario primero que reconozcas, que sola no puedes, y vayas delante de Dios, con un corazón arrepentido, con un deseo genuino de abandonar el pecado, y dile: Señor, yo reconozco que te he fallado, que he pecado contra ti, te confieso que hice «esto o lo otro» sabiendo que estaba mal, y no quiero fallarte más, te necesito.
Háblalo, dilo con tu boca. «Porque con el corazón se cree para justicia, y con la boca se confiesa para salvación.» Romanos 10:10 
Dilo, Señor yo renuncio a ese pecado, y lo nombras, le dices «te desarraigo de mi vida, ato todo espíritu de: (depresión, celos, envidia, mentira, lujuria…lo que sea que te esclavice) y lo expulso de mi vida para siempre, te vas fuera en el nombre de Jesús, yo soy nueva criatura, comprada con precio de sangre, y mis pecados ya han sido perdonados.
Tú vas a sentir como el Espíritu de Dios te hace la obra y lo todo lo que estaba atando tu vida al pecado se va y quedarás libre.
Vas a darte cuenta que verdaderamente en Jesucristo hay libertad.
No hay pecado que no puedas vencer, cuando realmente renuncias a él.
Esto se llama Autoliberación.
Empieza hoy, y luego me cuentas en los comentarios cómo te fue.
											